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martes, 22 de septiembre de 2009

Los abuelos.

Los abuelos




La foto que ilustra esta entrada se la he pedido prestada a mí amiga Victoria de su blog: "Los recuerdos de los abuelos".


Los abuelos
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Cada vez que veo en televisión reportajes sobre los ancianos, me viene a la memoria el recuerdo de mi abuelo Valeriano. Siempre le veo sonriente. Campechano. Amigo de bromas. Y recuerdo que como el, en aquella época, había muchos. Los veías en las casas con sus hijos en continuo trato con los nietos. Nadie se cuestionaba si la compañía de los abuelos era buena o mala para ellos, porque todos sabían que los abuelos eran insustituibles en el corazón de todos y cada uno de sus nietos.


Mi abuelo era zapatero. Lo mismo que lo fueron sus hijos, mis tíos. En aquellos tiempos, la gente no iba a comprarse zapatos a las zapaterías. Se los hacían. Era lo que hoy se dice como una alabanza... "personalizados". Recuerdo cuando iba a su casa, el olor del "cerote"; como hacía los cabos encerados con el. Las hormas, las cuchillas... y su charla, amena y simpática. Recuerdo que le llevaban los zapatos y botas para que los ahormara porque les apretaban o les rozaban o se le habían deformado porque llevaban mucho tiempo sin ponérselos. Mi abuelo los metía en la horma, los tenía allí tres o cuatro días y como nuevos.


Si, quería hablar de mi abuelo Valeriano. Y sin darme cuenta, se me van los recuerdos por otro sitio; pero bueno, al fin y al cabo, recordar todo esto, también es recordar a mi abuelo: Y desde luego, recordar lo mucho que le queríamos todos en casa. Con esto no voy a descubrir nada nuevo, porque todos aquellos que en su casa hayan convivido con su abuelo o abuela, saben que esto es algo tan normal, que a veces, se nos olvida. Y es una pena, porque la verdad es que los abuelos han sido siempre los amigos, los cómplices, los maestros, los bancos, -porque siempre los sacábamos alguna "perra"- los que nos iban enseñando poco a poco las cosas de la vida. Hoy existe una profesión nueva. Los "cuenta cuentos", pero eso ya era viejo en nuestra época, porque nuestros abuelos eran los mejores "cuenta cuentos" que nadie se pueda imaginar jamás. Hoy, lo triste es que ya los abuelos tienen muy poco roce con sus nietos. La mayoría están en las residencias. Lo que ocurre es que sus hijos te dicen lo bien que están allí y uno llega a pensar si de verdad lo creen. Porque uno cree que los abuelitos donde mejor deberían estar, es con sus nietos y con sus hijos. Enseñando todo eso que les costó una vida entera aprender. Su experiencia.


Pero claro, hay muchos que creen que donde mejor están es en las residencias. Si. Porque muchas veces los niños los dan mucha tabarra. No los dejan en paz, los agobian, les dan la lata, no los dejan descansar... ¬¡pobres abuelos! Claro que todo eso es porque no se les pregunta a ellos. Ni a los niños. Ni los unos ni los otros tienen voz ni voto a la hora de decidir lo que se debe hacer con los abuelos. Y es una pena. Se pierde un gran potencial humano que además es desinteresado. Y se pierde, sobre todo, esa capacidad de cariño que siempre han tenido los abuelos y algo no menos importante: se pierde toda esa experiencia tan enriquecedora que los nietos encuentran en el trato con ellos.


Siempre he pensado que es muy triste ver en la tele todas esas mal llamadas residencias donde los pobres viejos vegetan. Donde no hay para ellos ningún aliciente Donde casi nunca ven a sus hijos y mucho menos aún a sus nietos. Unos lugares donde los tratan como trastos viejos que no tienen ninguna utilidad, pero, por lo visto, les es rentable. Se me revuelven las entrañas. Y me acuerdo de mi abuelo. Tío Valeriano "Peseta". El zapatero. El que luego fuera durante mucho años, el portero de un cine que había en mí pueblo llamado Cine Jiménez. Recuerdo en una ocasión, que por unas obras en una residencia, se llevaron unos cuantos ancianos a un colegio de niños. No olvidaré nunca, como los padres de los niños protestaban porque sus hijos convivían con los pobres viejos. Como si tuvieran alguna enfermedad contagiosa, como si estuvieran apestados. Dando mil y una razones para justificar su queja delante de las cámaras de la televisión.



(Y viéndolos, yo me acordaba de mi abuelo. De lo bien que nos lo pasábamos cuando se quedaba a dormir en mi casa y nos acostábamos con el. Y nos contaba cuentos. Y nos regañaba cuando le decíamos las fechorías que habíamos hecho ese día. Porque sin que nunca haya sabido el porqué, a mi abuelo siempre le contábamos las cosas que hacíamos y que no le contábamos a nuestros padres. El se reía y siempre guardaba nuestros secretos. Quizás por eso le queríamos tanto. Era para nosotros como un amigo más con el que compartíamos todo y que siempre nos entendía e incluso nos alentaba un poco.)


También, es cierto, he visto no hace mucho en televisión la escena contraria; Un colegio de niños pequeños tuvo la iniciativa de llevar a sus alumnos a pasar el día a una residencia, para que los niños convivieran con los abuelos. Se les veía felices. Lo mismo a los niños que a los ancianos. Los niños cuidaban de los abuelos y los abuelos cuidaban de los niños. Como siempre ha sido, no han descubierto nada nuevo, pero al menos, lo han puesto de manifiesto también ante las cámaras de la televisión. Ojalá cunda el ejemplo. Ojalá podamos seguir viendo a los niños disfrutar con la compañía de unos cariñosos abuelos... aunque no sean los suyos. Sabemos que hoy las cosas no son como eran antiguamente, pero los niños y los ancianos sí son lo mismo que entonces. Tanto los unos como los otros siguen necesitados de amor. De afecto y experiencia los niños. Y de afecto y compañía los abuelos.


Recuerdo que cuando yo era niño, mi madre nos contaba la historia del hombre que llevaba a su padre cargado a las espaldas, camino del asilo -entonces eran asilos en vez de residencias- y cansado de la carga se detuvo a descansar sobre una gran roca que sobresalía al lado del camino. El anciano suspiró y dijo: Aquí también paré a descansar yo cuando llevé a mi padre al asilo. Y se puso a llorar amargamente. ¿Le remordió la conciencia a su hijo? O tal vez pensó que eso mismo también le podía ocurrir a el un día mas o menos lejano, porque el también tenía hijos. La cuestión es, - decía mi madre, - que cargando de nuevo con su padre emprendió el camino de regreso a su casa, pensando que siempre habría un hueco donde tenerle y por supuesto, tampoco faltaría un plato de comida para el pobre anciano.


¬¡Lecciones te da la vida! Lástima que hoy ya no se lleva a los padres como se llevaban entonces, cargados a las espaldas... y los coches no paran a descansar.












Lo escribí hace siete años, en el 2.002 pero creo que esto siempre está y estará vigente, porque el trato dado a los ancianos creo sinceramente que va a peor. Y lo siento porque  recuerdos como estos míos debe de haber mucha gente que los tenga... ¿no es verdad? Pensemos en ello. 












56 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta generación nuestra ha avanzado, ¿progresado? en muchos aspectos, pero ya no hay lugar para los ancianos, para los padres, para los abuelos. Son una carga que hay que aparcar en algún sitio. Por eso reclamamos del estado más residencias.
No nos damos cuenta de que lo que nuestros hijos ven que hacemos con nuestros padres, harán con nosotros mañana. Y mañana está a la vuelta de la esquina.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

he llorao leyendo tus palabras francisco y la imagen es preciosa he recordado a mi abuelo pepe que me enseño tantas cosas y cuanto lo hecho de menos gracias por tus divinas palabras y este homenaje a nuestros mayores

Juan Francisco dijo...

Anabel, casi llegas antes que yo. Hola hermosa así es. Siempre he defendido el papel de los abuelos en la vida de sus nietos, como antes lo fue en la de sus hijos. Ahora, soy abuelo. Tengo una nieta de 14 meses, que nos tiene locos y espero que durante mucho tiempo tenga a sus abuelos a su lado. Como decía el poeta, "no se mañana que traerá la vida, pero aquí estoy dispuesto a vivirla" y además a disfrutarla todo lo que mis fuerzas me permitan. Un abrazo sincero, Anabel.

Juan Francisco dijo...

Venus, recuerdo que mí madre (q.e.p.d.) era (como yo) una lectora empedernida. Leía de todo, pero la encantaba la poesía y recuerdo por ejemplo cuando leía El Ama de Gabriel y Galán, (solo como ejemplo) terminaba como una Magadalena llorando y nos decía "que bien me lo he pasado".
¿Me entiendes? A mí me pasa lo mismo. Besos. Juan.

Si hay alguien más dijo...

Juan te dejo un regalo en mi blog:
Es una foto que me encanta.Espero que te guste.
http://mbravof.blogspot.com/2009/09/los-abuelos.html.
Que sería de mi sin tus recuerdos!!
BESOS

Juan Francisco dijo...

Me ha emocionado sobrina. ¡Ah! pero ya me la he traido ¿vale?
Un recuerdo muy muy muy bonito y que te agradezco de todo corazón.
Cuando te levantas por la mañana no sabes que te va a traer el día y luego te enteras que ha venido a tí con un trocito del ayer tantas veces añorado. Gracias Sara y de verdad... ¡sorpréndeme cuando quieras! Muchos besos.

Isabella Ros dijo...

Me ha conmovido tu homenaje a quienes han dado todo por sus hijos y nietos y luego han sido olvidados como tú dices,pero sabes?todo llega en la vida, y esos que hoy miran hacia otro lado tal vez llegado el momento repitan la historia.Triste,pero real.GRACIAS JUAN,por tus palabras,por estar siempre detrás de cada una de mis poesías,es un honor.UN ABRAZO.

Lluvia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Lluvia dijo...

Buen tema y también muy conflictivo entre la familia cuando llega el momento de cuidarlos.
Hoy en día la mayoría no tiene hueco para cuidar al abuelo, triste pero real.
Muy bonito saludos.

Alma Mateos Taborda dijo...

Qué maravillosos recuerdos y qué trato distinto tenían los abuelos. Me ha conmovido tu relato. Excelente! felicitaciones! Un abrazo.

Trini Reina dijo...

Ha cambiado mucho la vida, desde que conviviamos, amábamos y respetábamso a nuestros abuelos hasta su instante final, a hoy. De todas maneras, también depende de las circunstancias de las familias.
En fin, a ver qué nos toca a nosotros...

Abrazos

Juan Francisco dijo...

Hola Isabella. Desde luego, no todo el mundo trata a los ancianos mal, aun quedan, gracias a Dios, gente con suficiente corazón y cariño hacia ellos, no se puede generalizar.Los otros, tal vez sus hijos no encuentren mañana una piedra donde descansar.
Para mí es un placer leer poesía. Me encanta y tu escribes muy hermosos poemas. Gracias a tí que pasas y al igual que los dem´s alegris con vuestros comentarios mís blog. Un abrazo Isabella. Juan.

Juan Francisco dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Juan Francisco dijo...

Bienvenida Marna. Me alegro de saludarte. El tema de los abuelos sabes que está muy a menudo en la prensa, y por desgracia nunca o casi nunca por cosas buenas, mas bien al contrario. Es triste que seamos así con aquellos que siempre han sido nuestro sostén.
Hay un dicho muy claro y certero: No nos damos cuenta de la deuda que tenemos contraida con nuestros padres, hasta que nos damos cuenta lo que cuesta criar a anuestros hijos. Un abrazo Marna. Juan.

Juan Francisco dijo...

Lo mas curioso Alma, es que en esos pueblos que la civilización llama salvajes y atrasados, se sigue manteniendo la consideración y el respeto a sus mayores. Lástima que para "avanzar" sean los mas débiles los que tengamos que soltar como si fuera un lastre. Bienvenida Alma. Un fuerte abrazo. Juan.

Juan Francisco dijo...

Si. Depende de las circunstancias Trini, pero no en todos los casos. La crisis puede ser mala para muchas cosas, pero cuando yo era niño estábamos siempre en crisis. Y las familias eran una piña. Con excepciones, por supuesto. Mi madre nos contaba esta historia, porque ocurrian cosas de esas.
Algo se está pudriendo para llegar a dejar a un pobre viejo abandonado en una gasolinera cuando su familia se va de vacaciones. Abrazos Trini y gracias por pasar y comentar. Juan

Anónimo dijo...

Si, tienes toda la razón, Adara es más fácil (jeje) muchas gracias por tus palabras. Ahora mismo me paso por todos tus blogs a leerlos, tengo que ponerme al día antes de volver a clase.

Un saludo!!

Juan Francisco dijo...

Hola Adara, me alegro de tener por aquí a una paisana de Badajoz. No se si se nota en mis blogs que soy extremeño, (yo creo que si) desde luego no lo disimulo. Te dejo que leas tranquilamente a ver si lo encuentras de tu agrado.
Feliz paseo.
Un abrazo. Juan.

Celia Rivera Gutierrez dijo...

J. Fco. Bravo Real,
he disfrutado tu relato y me has hecho recordar varias cosas.
En un tiempo yo di catecismo a chicos de 7 a 12 años de edad y se me ocurrió llevarlos una vez al mes (o algo así) a visitar a los ancianos y llevarles algo. Fue una experiencia muy buena, los chicos se sentían felices de escucharles, y los ancianos no se diga, felices de contarles cuentos. Un día llegue a pensar, que si los que tienen a su cargo los asilos de ancianos y los que tienen a su cargo los asilos de huérfanos pusieran sus residencias cercanas e hicieran que los chicos adoptaran un abuelo y viceversa, seria conectar dos polos de personas necesitadas de amor. Es un simple sueño que cruzo por mi mente. Ya que lo que pienso que debe ser es que los ancianos esten con su familia
Y si el gobierno apoya estos asilos o residencias deberían apoyar a las familias con lo mismo para que puedan tener en casa a sus viejos. Y también creo que los hijos sin padres que están en los asilos de huérfanos no deberían estar ahí, sino que los adultos deberíamos darnos cuenta que son hijos de todos y adoptarlo y darles una familia. No deberían existir huérfanos todos deberían tener una familia.

También recordé como un tío mió se quedo a vivir en la casa del abuelo después de casado y como sus hijos eran majaderos con nuestro abuelo, eso nos enojaba porque para nosotros el abuelo era para quererlo y respetarlo. Deseábamos que se salieran de ahí y buscaran su propia casa, pero un día se hicieron viejos y los chicos crecieron y como los cuidaron para ellos eran otros padres a quienes amar. Entonces supe que aquello que no me gustaba para los abuelos era el precio que pagaban por adelantado para morir rodeados de amor. Veo distinto desde entonces cuando veo un nieto majadero con sus abuelos.

Alma naif dijo...

Me has movido el corazón, bueno a mi se me mueve siempre con estos temas amigo, con los abuelos y los niños con capacidades diferentes tengo una debilidad...
Es cierto hoy dia a casi todos los abuelos se los lleva a lo que decimos aca Residencia geriatrica, por cierto una tia mia que casi no visito tiene una y seguro que le deja mucho dinero, hace tiempo que no pasa por casa... pero bueno yo tambien me fui por las ramas...

Es cierto que los abuelos siempre tienen esas historias que contar, tan de ellos, tan graciosas, la mia vive en mi casa, y siempre repite sus mismas anecdotas, pero me hace reir mucho cuando lo hace, cuenta de su vida en el campo, cuando de pequeña se levantaba tremprano a ordeñar las vacas y todos los quehaceres de ese lugar claro... y despues de sus bailes y sus conquistas amorosas, es que es una señora muy bella y lo era mucho mas cuando era joven, siempre con su collar de perlas para salir, ese que se usa para las grandes ocasiones...
Tendria un monton de cosas para contar, pero si. me da tristeza que los abuelos terminen en una residencia, SOLO, por una cuestion de salud demasiado triste y sabiendo que en la casa nadie los puede cuidar podria decirte que admito ese lugar, pero quizas solo por eso, pero tambien me niego, porque se, que siempre se puede buscar la forma de cuidarlos, de alguna manera cuando enferman... espero que en mi caso, sea dentro de mucho tiempo... me gusta tenerla cerca!!!
Besos cielo, llenos de luz para ti!!!

Juan Francisco dijo...

Celia, mi pregunta podría ser... ¿como es posible que tengamos unos políticos que ganan muchos millones al año, que derrochan muchos mas en cosas que ni nos imaginamos y no sean capaces de hallar una solución tan fácil como la que tu propones y yo dejo entrever?
¿No es una triste paradoja? Yo estoy copletamente de acuerdo en lo que dices y quiero creer que tanto en tu país como en el mío y en otros muchos mas, hay infinidad de personas que comulgan con nuestras creencias.
No se la legislación sobre el tema de los abortos como estará en Mexico, pero ¿te imaginas que en España haya miles de matrimonios o parejas que no puedan tener familias y en el año 2.008 se practicaran mas de 100.000 abortos
aquí? ¿Te imaginas una ministra de "Igualdad" que nos diga que un feto con 22 semanas es un ser vivo pero que no se puede asegurar que sea un ser humano? ¿crees que gente de esta catadura puede buscar soluciones a ese problema del que hablamos? Si no se defiende a esos seres indefensos que son los niños no nacidos... ¿como van a defender a los ancianos que ya solo producen gastos?
Viendo todas estas cosas, prefiero mis ideas aunque segun estos progres yo sea un anticuado. Prefiero serlo y seguir defendiendo mis creencias mientras no se me demuestre que estoy equivocado, que defender la vida tanto de esos inocentes no nacidos (pero que para mí son niños) como de esos pobres abuelos que en muchos casos vegetan hasta morir en residencias que solo buscan lucrarse a su costa.
Bueno Celia, perdona, pero hay cosas con las que no puedo transigir y me sale la vena rebelde.
Seguiremos en contacto, porque hay muchas cosas en las que seguro estoy de que coincidiremos. Un sincero abrazo de este amigo español. Juan.

Juan Francisco dijo...

Mas o menos, la respuesta que puedo darte, Sol, es la misma que le he dado a Celia Rivera Gutierrez y lo que se le puede dar a cualquiera que como nosotros sienta que hoy los abuelos no son tratados con el amor, el cariño y el respeto con que eran tratados hace unos años. Cuidado, no digo que todo el mundo los tarte mal, conozco infinidad de familias en las que los abuelos siguen siendo una pieza fundamental en la familia.
Me dices que la tuya vive en tu casa. Que puedas disfrutarla mucho tiempo, porque pienso que se merecen todo lo que se haga por ellos. Te digo como a Celia, habrá ocasiones de hablar extensamente de estas y otras cosas en las que seguro que coincidiremos.
Un abrazo de todo corazón amiga Sol. Juan.

Esthi Rubio dijo...

mi querido Francisco ya con este van tres comentarios que te hago y no me deja publicarlos cosas de los blogs, decirte que trajiste a mi memoria los más bellos recuerdos, y que me meti en tu historia personal, con un abuelo zapatero sin igual, que artesania, que bondad y perfección en hacer las cosas bien, y en transmitirlo a los demás.
Yo a mis abuelos no los conoci, pero he de decirte que tuve un padre sin igual, poeta y juglar, porque decia la vida en verso, no escribío nada porque no tuvo tiempo, siempre trabajando, pero nunca dejó de lado el amor de sus hijas, nos fue enseñando a querer la vida, a abrazar el momento y a disfrutar de la poesia y de todo lo artesanal. Nos contaba que su padre, mi abuelo, era profesor de escuela itinerante y que se estuvo carteando con mi abuela a escondidas durante 12 años, un amor de los que ya no hay.
Me encanta que me allás transportado en el tiempo.
Y deberiamos sentirnos agradecidos por tanto cariño y enseñanzas que nos dan los mayores aunque aveces no queramos escucharlos.
Enhorabuena por traer aqui, el recuerdo de tanta gente maravillosa, y esperemos que nosotros cuando seamos mayores no acabemos en un triste asilo.
Un abrazo y gracias por ser el nieto del zapatero.

ROCIO dijo...

Que hermosa imagen y que bello escrito, la figura de los abuelos es tan importante y nos enseña tanto.

Me gusto visitarte desde el blog de Mar de Libertad.

Cordial saludo.

Rocío

Juan Francisco dijo...

Hola Esther, a veces a mí también me pasa eso algunas veces. No se porqué será, pero no puedes publicar los comentarios.
Sobre el tema de los abuelos, te diré que son algo muy especial (o lo eran) para cualquier persona con un poco, solo un poco de sensibilidad y corazón. Yo he contado solo alguna cosa de las que a veces recuerdo; la memoria va y viene y a veces no recuerdas algo y luego cuando menos lo esperas lo tienes en tu mente. Y eso me gusta, porque yo soy de los que piensan como Nietzche, que decía que "tener mala memoria nos sirve para disfrutar muchas veces con las mismas cosas". ¿No es verdad? Mi abuelo era zapatero y yo siempre me he sentido orgulloso de el y como comprenderás sigo sintiendo lo mismo. No creo ser tan vanidoso para creer que como el mío no ha habido, hay y seguirá habiendo abuelos en todo el mundo gracias a Diós.
Pero lo que mas me gusta es que con mí comentario he logrado que a un@s cuant@s amig@s bloguer@s se les hayan removido (como decía mi madre) las entrañas. Y eso es bueno, porqué para eso escribimos, para sacar a flote los sentimientos mas recónditos que llevamos dentro. Leer y entender es algo; leer y sentir es mucho, pero leer y pensar es cuanto puede desear un escritor que ocurra en la mente de aquellos que leyeron sus escritos. Y la prueba la tienes aquí, en los comentarios tan sabrosos que mis amig@s me han dejado, incluidos los tuyos. Si, Esther, tu tambien has pensado en tus abuelos... ¿verdad?
Un fuerte abrazo amiga. Juan.

Juan Francisco dijo...

Hola Rocío, Mar es una buena amiga y además escribe cosas preciosas, o al menos, para mí gusto.
Sobre los abuelos, ya ves como mis amig@s se han explayado a su gusto, y yo me siento muy orgulloso de que lo hayan hecho. Sobre todo porque he logrado que tod@s tengais en vuestra mente a esos seres tan queridos. (Al menos hoy).
Bienvenida a este tu blog desde ahora si así lo deseas.
Besos sinceros. Juan.

LuLLy, reflexiones al desnudo dijo...

Es un sentido homenaje en pro de los ancianos que me ha enternecido. Ellos merecen todo nuestro respeto, atención y sobretodo, acompañamiento y alegría.

Un abrazo amistoso desde mi blog: Reflexiones al desnudo

Juan Francisco dijo...

Bienvenida a este blog Lully y gracias por tus palabras en benficio de los abuelos. En verdad que son hoy el personaje que todos añoramos y recordamos con el cariño que se merecen. Pasaré por tu blog en breve, Un abrazo Lully.

Anónimo dijo...

Esas remembranzas... que a pesar de la distancia fìsica, me resultan tan cercanas...

Muy hermoso el relato...mis felicitaciones

mardelibertad dijo...

Grandes palabras a personas entrañables.me hicste recordar el ayer los momnetos vividos con los abue@s, fueron especiales,me han llegado tus letras
Besos

Sandra Figueroa dijo...

Te leo y recuerdo a mis abuelos que ya no estan. Que triste ver a los ancianos en Asilos o esas casas donde los cuidan, pero donde sus hijos o nietos no pasan a verlos. Me gusta leer tus recuerdos, me llenan de nostalgia. Besos, cuidate.

Juan Francisco dijo...

De méxico me llega
la voz amiga
apiñada en renglones,
como una espiga.
Las remembranzas
en Mexico se sienten
como en la Mancha.
Hola Adelfa como te digo arriba, los recuerdos son iguales, porque el ser humano es igual en todas partes. Si sientes compasión la sientes en cualquier psrte del mundo y si no la sientes, también es igual. Un abrazo.

Juan Francisco dijo...

Hola Mar, no sabes la alegría que siento cuando me dices que "te hice recordar el ayer, los momentos vividos con los abuelos" porque justamente eso es lo que cuando escribimos pretendemos. No es que nos hayamos olvidado de ellos definitivamente, (quien los haya tenido siempre los recordarán)
es traerlos otra vez a nuestra memoria. No muere quien sigue viviendo en el recuerdo de aquellos que le quisieron. Un abrazo Mar.

Juan Francisco dijo...

Hola Sandra. Pobres de esos abuelos olvidados en esas frías residencias en las que tal vez haya calefacción que caliente sus cuerpos, pero donde siempre falta calor para su pobres corazones.
recuerdo deber leido no se donde, que en una ocasión un anciano buscaba familia que le adoptara y la encontró. Salió en televisión. ¿Tu crees que no habría mucha gente que haría eso? Un abrazo Sandra y sigue teniendo la capacidad de sentir nostalgia.

Anónimo dijo...

gracias Paco...lo subì a la misma entrada...saludos

hoy dijo...

qué bonito homenaje a tu abuelo... estoy tan de-acuerdo con todo lo que dices... a veces me da tanta pena alguno de los de-rroteros por los que estamos avanzando en ésta sociedad, ya que cosas tan obvias como la que tú cuéntas han dejado de ser importantes para demasiada gente...
Me enterneció muchos pensar en tu abuelo.
un abrazo

Juan Francisco dijo...

Ya pasé a verlo, Adelfa. Si sirviera para algo...
Seguiremos intentando hacer del mundo un lugar al menos mas habitable. Te desoe un buen día. Juan.

Juan Francisco dijo...

Gracias Hoy, por ese sentimiento de adhesión hacia mí abuelo. O mejor los abuelos y abuelas en general, pues creo que es un mal aplicable a cualquiera de los dos sexos. Gracias por pasar y por dejar un comentario. Pasaré por tu blog. Un abrazo. juan.

*.Jessica.* dijo...

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Gracias por visitarme y dejarme tan lindas palabras un besito en este domigno para ti.

Juan Francisco dijo...

Hola hermosa Jessica, me alegra infinito que me visites. Hoy he estado viendo el blog de tu amiga Rosario y me ha gustado mucho. Y el poema que te ha dedicado su amigo es precioso. Como me alegro que tengas tantos y buenos amigos. Espero llegar a ser uno de ellos. Te deidcaré algún día también alguno de los míos a ver si te gusta. Bueno, Jessi, te deseo una buena tarde de Domingo con tus papas. Un abrazo. Juan Francisco.

Juan Francisco dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Juan Francisco dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ROSA dijo...

Mi querido amigo, el tema de nuestros mayores, nuestros abuelos es algo que me llega profundamente al corazón.
Mis hijas adoran a mi madre, y adoraban a mi padre, sintierón mucho su muerte, aún no lo han superado.
Ellos me las criarón mientras su padre y yo trabajamos, la labor de los abuelos con sus nietos es unica e irrepetible.
Es el mejor tesoro que le damos a nuestros hijos el amor a nuestros padres, ese es el ejemplo que permanecera en sus recuerdos
Muy buen tema, y me encanta como lo has desarrollado lleno de una carga humana increible
Un besito Rosa

Juan Francisco dijo...

Hay muchas personas, gracias a Diós que compartimos esa manera de ver las cosas Rosa. Yo lo que no digiero es como se comportan otras muchas, porque la historia que cuento es real. Madres queriendo denunciar al colegio porque los pobres ancianos a los que llevaron a vivir al gimnasio por obras en la residencia convivian con los niños. Luego cuando vieron que lo que decían no era razonable, y la gente se lo criticaba, apelaban a lo sencillo... "no, es que lo abuelos aquí están mal atendidos. Es que los niños les molestan etc etc. mentiras. Los niños lo desmentían porque salian jugando con los abuelos tan contentos. No se si has leido el comentario de Celia, una maestra que propone que se hicieran cerca los colegios y las residencias y otras cosas muy dignas de tenerse en cuenta. Siempre he creido que la mayor riqueza que unos padres pueden dejar a sus hijos es un infancia feliz y eso no es factible si se elimina a los abuelos de su vida.
Bueno Rosa, que me gustó mucho tu blog y el homenaje a la pequeña Jessi. Me parece una cria deliciosa.
Un fuerte abrazo y seguiremos en contacto. Juan.

Sandra Figueroa dijo...

Gracias Fco, por tus saludos, aqui estoy para dejarte un beso, cuidate amigo.

Juan Francisco dijo...

Sandra, es un placer pasar por tu blog, leer, comentar y dejar un saludo no lo dudes. Seguiré haciéndolo. Besos para ti y feliz semana. Juan.

Anónimo dijo...

Al leerte me hiciste volar en los recuerdos. Igualmente tengo muy gratos recuerdos de mi abuelo.
Un verdadero gusto leerte. Saludos.

Juan Francisco dijo...

Hola Salvador, encantado de recibirte por aquí. Me imagino que todas las personas que hayan conocido a sus abuelos cuando eran niños tendrán recuerdos de ellos y además recuerdos muy entrañables.
La pena es que hoy cada vez están mas abandonados, hasta el punto de hijis que les han dejado abndonados cuando se van de vacaciones. Vergonzoso.
Bueno Salvador, gracias como te he dicho por pasar. Mañana me daré un paseo y leeré tus poemas, que de pasada he visto, y me han gustado. Un abrazo.

Sandra Figueroa dijo...

Paso a dejarte un saludo y beso a la distancia, cuidate mucho amigo. Gracias por existir.

Juan Francisco dijo...

Gracias Sandra. Que pases buen fin de semana y disfrutes de la vida. Un abrazo.

Victoria dijo...

Mi querido Fco,me has dejado sin palabras,he trabajadomuchos años con ellos,comoA.S.C. y muchos de ellos lloraban lagrimas de sangre por dolor causado por sus hij@s,esuna pena que no se den cuenta que cuando son jovenes estan ahi siempre,demarores ya molestan,su tos,su todo amigo..gracias por compartir.Con cariñoVictoria,te he enviado una invitacion a tu correo para que puedas entrar a ese blog,soloamig@s..besosamigo

Juan Francisco dijo...

Hola Victoria, bienvenida. Tienes razón, pero quiero creer que es solo una minoría la que hace esas cosas. Lo triste es que es una minoría muy grande.
Ya recibí el correo, y he pasado, aunque a veces no deje comentarios, todo lo que publicas lo leo. Un abrazo Victoria.

Victoria dijo...

Me alegro que este nuevo blog te llene,yo he llorado trabajando con ellos durantes muchos años,en vivo,siempre cuando entraba y les veia su carita,pensaba como podian sus hijos,ya que paa mi era un sala de espera--Compartiamos nuestras cosas y los escuchaba y nos quedabamos en silencio..gracias por compartir,hace que no te veo..si estas enfadao.perdona..Con cariño Victoria

Juan Francisco dijo...

Espero que no lo pensarás de verdad Victoria. Sabes que no soy así.
Seguiremos leyendonos y comentando.
Un besos.

En Buenas Manos dijo...

Hola J.Francisco.
Buenos dias en esta mañana de
domingo...Muchas gracias por tus
calidas palabras en mi blogger y
por invitarme a seguirte.
Tu blogger es un rinconcito muy
acogedor,no he podido leerlo todo
por falta de tiempo,pero sin duda
la dedicatoria que has hecho a
"los abuelos" me ha encantado y emocionado a la vez.
Pienso que los abuelos son una parte y un pilar fundamental en la familia...Yo no tuve la oportunidad
de disfrutar de ellos,pues unos murieron sin poder conocerlos y otros estaban tan lejos que apenas
teniamos contacto.
Pero mis hijos han disfrutado con
mis padres (los abuelos),ellos son
los que siempre nos han hechado una
mano,cuidando de ellos cuando nosotros los padres teniamos que ir atrabajar,los que le han educado
y consentido a la vez,pero siempre
de una manera sana y paciente.
Diria muchas cosas mas del papel de los abuelos,pero me extenderia
mucho.Hoy al paso de los años,mis hijos ya mayores,tienen pasion por
sus abuelos y ahora son ellos,los
que siempre les ayudan,les miman,
los abuelos sembraron y ahora estan recogiendo el fruto a todo
ese cariño y constancia.
Sin duda alguna te digo,que yo nunca seria capaz de alejar a mis padres de mi lado y mucho menos,
llevarlos a un centro,ademas,mis hijos me matarian jajajaja.
Un besito y encantada de haberte
leido aunque sea un poquito.
Que disfrutes del domingo y gracias.

Juan Francisco dijo...

Para: En Buenas Manos.
Gracias por tu visita y comentario. Como te puedes imaginar, para mí hablar de los abuelos es gratificante. Hoy que también lo soy (se acaba de marchar mí hijo con mí nieta de 15 meses)es todavía mayor mi admiracicón y afecto por ellos. Llegué a conocer a tres, pero mí abuela materna se fue cuando tenía 5 ó 6 años. Pero la otra abuela si la disfruté y sobre todo el abuelo paterno, al que hago referencia en esta entrada era como he dicho en ella algo especial, amigo, compañero, asesor, censor, (cariñoso)nuestra hucha... todo. Espero ser para mí nieta y alguno mas si llego a tenerlos, como lo fue mí abuelo Valeriano para mis hermanos y para mí. Con defectos... ¡como no! pero es que si no los tuviéramos no seríamos personas. Me alegra haber "charlado" contigo y me alegra saber que tienes unos padres que son queridos por sus nietos.
Un fuerte abrazo y seguiremos en contacto.